En el enamoramiento intervine, y de una manera importante, el sentido del olfato. Cada persona posee un aroma único y distintivo y somos capaces de reconocer hasta 10.000 aromas distintos. Muchos animales utilizan los olores para seducir y nosotros no nos escapamos a éste hecho antropológico.
Los antiguos griegos, así como los chinos y los hindúes utilizaban para seducir una mezcla de castóreo (su origen son las glándulas odoriferas de los castores provenientes de Canadá y Rusia), del almizcle (feromona rojacea proveniente del ciervo de Asia) y el civeto (secreción de los felinos civeto de Etiopía).
A lo largo de la historia se han utilizado diversos métodos para enamorar a través de los olores. En la época de Shakespeare, las damas se ponían una manzana pelada bajo sus brazos y, una vez la fruta era impregnada por el aroma de la mujer, ésta se la daba a su amante para que la recordara a través de su olor.
En un estudio científico realizaron una prueba pulverizando una cantidad pequeña de exaltolide (combinado similar al almizcle masculino) en un asiento. Las mujeres que entraban en donde se encontraban los asientos, escogían el vaporizado, mientras que los hombres escogían otros asientos.
En otro estudio que realizó la Fragance Fundation, tanto las mujeres como los hombres encuestados puntuaron con 8,4 sobre 10 la influencia del olor en las relaciones sexuales.
Los aromas son muy importantes en nuestras vidas y en Centhylon te ofrecemos una gran variedad de fragancias en formato de ambientadores, velas aromáticas y home fragrance. Seguro que encontrarás el ambientador con el que enamores de una manera implacable.
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